miércoles, 23 de abril de 2008

¡AIRINA!

¡Airina! Ven, toma una aspirina
Voy, ya voy
deprisa,
a sentarme en tu regazo,
para que me mimes
que no me encuentro bien.
Voy, ya voy
deprisa
que en tus brazos, huelo
el pasado feliz, la infancia,
mi jardín.

La terraza y los pinos, la playa
y los niños
las bicis y abarques,
merienda y
La calle.
La sal.
Las cañas de pesca
con pasta de queso viejo y pan,
el corcho que flota
¡ se hundirá!
El cubo con peces
la perra a mi lado
mi hermano que llora,
tu mano paciente
que le consuela.

¡Airina!, ¡ven a la cocina!
Voy, ya voy
deprisa,
que quiero cenar
sopas de partera y sopas de pan
no quiero acostarme,
¡queremos jugar!
Y cuando me mandes
por fin a dormir
elegiré lo que voy a soñar:

Mi casa en el mar
barquita en movimiento,
¡remad, remad!
Y ahora, apuraos,
¡qué el barco se va!
digamósle adios, agitando la mano
encendiendo hogueras
ya en Bajamar.

Y, un arbol de moras,
enormes, calientes
que manchan el suelo
la mesa y los bancos;
mi madre nos trae
las barras de pan,
el queso con uvas;
la Felicidad.

¡Airina, mi niña, que vengas ya!
Voy, que voy ya
deprisa
no voy a tardar;
tan sólo un minuto
para recordar
que yo soy Airina
que tú eres Papá.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Precioso, Irene.
Lleno de olores, situaciones, luces, intenciones.
Voy a elegir lo que quiero soñar...
Jaime.

Anónimo dijo...

Irene, pasé por tu blog. Me gustó mucho, y este poema me ha recordado los veranos en la playa. ¿Recuerdas las excursiones por la tarde a Montarena? yo sí, muchas veces. Abrazos

Joseba

ICF dijo...

Gracias, Jaime. Airina era un nombre que hace muchos años que no me llamaban.. y ya ves, me recuerda lo mejor...

ICF dijo...

Joseba,

¿Cómo no voy a recordar nuestras caminatas a la playa, a Montarena? ¿Y aquellas sandías gigantes que traia mi abuela en la enorme cesta de paja que nos turnábamos para llevar? Son Park está tan lejos ya... Me alegro mucho de verte por aquí! un besazo y también para Mariajo