Me pregunto,
adónde fuiste, dónde estás;
recorrí una vida, mil kilómetros,
para comprobar que no eras.
Y sin embargo, permanecí;
aferrada a las cadenas que son las excusas
a la espera del mañana – qué sucederá mañana?
Y viendo como, cada dia, hoy, pasa la vida,
en el rostro avejentado y triste que a través del mar
te busca
No hay comentarios:
Publicar un comentario