Es recurrente
enfadarme
insistir, tocar, besar
hablar, hablar, hablar,
pesar
y
expresar.
Pensarte, pensarme
y pensar.
Es recurrente
enfadarte,
gritar
pensar, pensarte,
no hablarme,
abandonar.
Porque lo que es recurrente
parece familiar.
Mas mejor nos iría,
compañero
en recurrir a caminar
hacia adelante,
sí
pero también
- lo justo nada más-
desandar, sí, sí,
hacia atrás:
Para encontrar las alegres rutinas
de las risas los proyectos y
la vida de V E R D A D.
De aquella que
-recurrentemente-
llamar a la puerta,
en la que un día
- inteligentemente -
pusimos el cartel de
No Molestar
No hay comentarios:
Publicar un comentario