domingo, 25 de mayo de 2008

Domingo en rojo y blanco

Todas las desilusiones y los momentos de desánimo,
los domingos de cielo plomizo y cargante humedad

Todos los silencios de las personas, los insulsos diarios, los enmudecidos teléfonos
y la amenazante lluvia que se adivina en el horizonte,
ensombrecen tu recuerdo que aún vive como la flor blanca que brotó en mi corazón

Todas las cosas que no son perfectas pero existen,
deberían fundirse con el sencillo y milagroso instante en que puedo,
caminando por la calle, olerte
en la enredadera de jazmín que ha trepado por el muro centenario del hotel rojo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

hi ha un hotel vermellos, l'he vist, i no es diu desitg com pensava, em va semblar acollidor.

com s'ho fa I. per sorpendre continuament?
escriu les paraules que m'agrada llegir, una forta abraçada, m'agrada tot el que diu.

JAUME TIMONER dijo...

Hola !

he tornat a remirar el seu blog i com em sembla molt recomenable, el posaré entre les meves planes amigues i les que visit sovint.

Enhorabona.

Salut